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El compliance o cumplimiento normativo se refiere al conjunto de procedimientos y buenas prácticas adoptadas por una empresa para garantizar que actúa de acuerdo con el marco legal y normativo que le aplica. Es un mecanismo para prevenir, detectar y responder a posibles infracciones o comportamientos ilegales que puedan generar responsabilidades tanto a la empresa como a sus empleados.

El compliance no solo cubre el cumplimiento de la legislación, sino también el código ético, normativas internas, el plan de igualdad, o el plan de acoso. Su objetivo principal es minimizar riesgos legales, reputacionales o financieros, al asegurar que las acciones de la organización están alineadas con la normativa vigente y los valores de la empresa.

¿Es obligatorio el Compliance?

Las empresas pueden ser penalmente responsables por delitos cometidos en su nombre o beneficio por sus directivos o empleados. Sin embargo, si una empresa demuestra que cuenta con un programa de compliance efectivo, que incluye medidas preventivas y un sistema adecuado de supervisión, puede eximirse de esa responsabilidad o reducir significativamente la pena.

Es decir, las empresas están obligadas a implementar sistemas de prevención del delito para cumplir con la normativa y protegerse frente a posibles sanciones. Un programa de compliance bien estructurado debe cubrir las áreas de riesgo y contar con mecanismos de control, seguimiento y corrección.

 

¿Quién está obligado a implementar el Compliance?

Aunque todas las empresas deberían contar con un programa de compliance, hay algunas que están especialmente obligadas, por ejemplo:

  • Grandes empresas: por el volumen de su actividad y el impacto económico.
  • Empresas que operan en sectores regulados como banca, seguros, farmacéutico o telecomunicaciones, que tienen mayores exigencias regulatorias.
  • Empresas con contratación pública: están bajo mayor escrutinio y deben seguir estrictas normativas de transparencia.

Sin embargo, la responsabilidad penal de las personas jurídicas aplica a todas las empresas, independientemente de su tamaño. La adopción de programas de compliance es especialmente recomendable para evitar riesgos legales.

 

¿Qué áreas forman parte del Compliance?

El cumplimiento normativo abarca diversas áreas que varían según el sector y las particularidades de cada empresa. Algunas de las áreas más comunes son:

  • Código de buenas conductas: establece normas éticas y estándares de comportamiento esperados en la empresa.
  • Riesgos de fraude y corrupción: Incluye medidas para prevenir delitos como el soborno, blanqueo de capitales y otras actividades fraudulentas.
  • Responsabilidad penal: trata de evitar delitos corporativos que puedan derivar en sanciones penales para la empresa.
  • Prevención del acoso y discriminación: garantiza un entorno laboral libre de acoso laboral, sexual y cualquier forma de discriminación.
  • Igualdad y diversidad: asegura el cumplimiento de políticas de igualdad de género y diversidad en el lugar de trabajo.
  • Protección de datos: en cumplimiento con normativas como el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR), para proteger la privacidad de los datos personales.
  • Prevención de Riesgos Laborales (PRL): dirigido a proteger la seguridad y salud de los trabajadores.
  • Prevención de Blanqueo de Capitales (PBC): para evitar que la empresa sea utilizada en actividades ilegales relacionadas con el lavado de dinero.

Ventajas de realizar formaciones internas en Compliance

La formación en cumplimiento normativo es fundamental para asegurar que todo el personal comprende sus obligaciones legales y las políticas internas de la empresa. Algunas de las ventajas clave de implementar formaciones internas incluyen:

  • Prevenir sanciones: porque al formar a los empleados sobre las normativas aplicables, se reduce el riesgo de cometer infracciones que puedan acarrear multas o sanciones.
  • Mejorar la reputación: porque las empresas que demuestran un compromiso con el cumplimiento legal y ético mejoran su imagen ante clientes, inversores y colaboradores.
  • Mitigar los riesgos legales: porque un programa de formación bien diseñado ayuda a identificar y mitigar riesgos legales antes de que se materialicen en problemas.
  • Crear una cultura ética: porque la formación fomenta una cultura empresarial basada en la transparencia, la ética y la responsabilidad.
  • Adaptarse a cambios normativos: la normativa cambia constantemente, por lo que la formación continua permite a la empresa estar siempre al día con los requisitos legales.

Buenas prácticas en la formación del Compliance

Es importante implementar un programa de formación en compliance que sea efectivo, para garantizar que todo el personal comprenda y aplique las normativas en su día a día. Te contamos algunas buenas prácticas que pueden interesarte para crear tus formaciones en cumplimiento normativo:

  • Adaptar y personalizar los contenidos: ya que la formación debe adaptarse a las necesidades y riesgos específicos de la empresa. Por ejemplo, una empresa del sector financiero necesitará un enfoque diferente al de una empresa tecnológica.
  • Casos prácticos: incorporando ejemplos y situaciones reales para facilitar la comprensión de cómo aplicar los conocimientos teóricos en el día a día laboral.
  • Duración: aplicamos el criterio de menos, es más. Mientras más ligero y corto, con mensajes claros y concretos, estaremos garantizando una llegada más directa a la atención. Para aquellas empresas que bonifican a través de FUNDAE la formación, la duración mínima debe ser de dos horas, pero puede fraccionarse en pequeñas píldoras.
  • Evaluación de conocimientos: es recomendable realizar una evaluación para verificar que los empleados han comprendido la materia. Esto también sirve como evidencia del compromiso de la empresa con el cumplimiento.
  • Acceso continuo a la información: teniendo cada persona acceso constante a la normativa interna, políticas de compliance y un canal de denuncia confidencial para informar posibles irregularidades.
  • Cultura del cumplimiento: la alta dirección debe implicarse en las formaciones y dar ejemplo, promoviendo una cultura organizacional que valore el cumplimiento normativo como un pilar fundamental.

Ejemplos prácticos de formaciones en Compliance

Ya hemos comentado qué importante es la formación en Cumplimiento normativo para una empresa, pero hay que hacerlo desde un punto de vista práctico para que estas pautas calen realmente en las conductas de las personas.

Puedes reforzar estas pautas a través de cursos creativos y motivadores, que utilicen las historias y el juego para enganchar a tu equipo. No sólo les estarás formando correctamente, sino que también le lanzarás un mensaje potente: “invierto y cuido a mis personas”.

Aquí tienes tres ejemplos de cómo podemos utilizar estas metodologías para transformar tus cursos en experiencias, y a tus empleados en aliados:

Cumplimiento normativo: RGPD

Una historia con mucho suspense, donde un hacker ha conseguido encerrar a Andrés e inculpará de todos sus delitos de robo de datos.

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Cumplimiento normativo: Ciberseguridad

Una auditoría diferente y divertida a través de un juego que presenta retos y una competición. Una forma práctica de aprender.

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Cumplimiento normativo: PBC y FT

Un equipo de superhéroes que velan por la seguridad de su empresa. Una trepidante aventura para conseguir atrapar a los delincuentes y evitar el fraude.

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Cómo adaptar tus formaciones de Compliance

Contáctanos. Tenemos muchísima experiencia en crear formaciones en Compliance para empresas como Bonpreu, Indra, Orenes, Isdefe, Idilia Foods, Cerealto Siro, BNP Paribas y muchas más, que ya han convertido sus formaciones en experiencias envolventes.

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Virginia Gaitán

Consultora creativa de proyectos e-learning

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